Cuando un espejo se rompe: El origen de las más famosa de las supersticiones

21.04.2013 02:46

Cuando un espejo se rompe: el
origen de la más famosa de las
supersticiones
No pasamos la sal en la mano, y
que Dios nos libre de que se nos
cruce un gato negro. Ni hablar de
pasar por debajo de una escalera
y así con una serie de creencias.La superstición es parte de la
historia de la humanidad y son
muchas las que seguimos al pie
de la letra.
No pasamos la sal en la mano, y
que Dios nos libre de que se nos
cruce un gato negro. Ni hablar de
pasar por debajo de una escalera
y así con una serie de creencias.
Pero sin duda hay una que nos da
terror, ya que podemos vivir un
día de mala suerte, pero
enfrentarnos a siete años, es algo
que nadie quiere.
Se trata de cuando se quiebra un
espejo, una de las supersticiones
más temidas y la que nos lleva a
andar con mucho cuidado con
este artículo de belleza.
Pero ¿qué hay de cierto y cuál es
el origen de esta creencia? El
portal Esoterismos.com contó la
historia y acá la relatamos, para
que sepas de donde viene esta
temida teoría.
El origen de esta superstición es
diverso y una de las historia habla
de como el origen de romper un
espejo y la mala suerte, era una
forma de asustar a criados y
sirvientes, para que tuvieran más
cuidado en lo que hacían.
Por otro lado, está el arte de
adivinar el futuro por medio de
los espejos o catoptromancia, una
forma de abrir una puerta de
entrada a los espíritus del más
allá. Se supone que al romper un
espejo se abría esta puerta de
entrada a los espíritus algunos
malignos que podrían estar en el
otro lado.
El cine ha usado esta superstición
en películas como Dentro del
Laberinto dirigida por Jim Herson.
En una secuencia de la película
Sarah ha de cuidar de su
hermanito pequeño que llora sin
parar. Cansada del llanto de su
hermanito, Sarah lo pone frente a
un espejo y le pide al Rey de los
Goblins (un personaje de su libro
favorito) que se lo lleve. Su deseo
se verá cumplido y el rey de los
Goblins se lleva a su hermano,
solo tendrá 13 horas para lograr
recuperarlo.
Por otro lado, está el poder de
reflejar la imagen de los espejos.
Hace siglos la gente veía su
reflejo sobre el agua de ríos,
lagos o estanques y llegaban a
pensar que el reflejo era parte de
ellos. Si mientras estaban
contemplando la imagen esta
desaparecía al agitarse el agua,
pensaban que era su culpa y esto
les traería mala suerte. Después
cuando se comenzó a usar los
espejos al romperse y dejar de
reflejar la imagen se asoció a un
mal presagio.
En las memorias del filósofo
francés Benjamin Constard, se
hace mención a la superstición de
los espejos relacionada con
Napoleón Bonaparte.
Durante una de sus campañas en
Italia rompió el cristal del retrato
de Josefina. Napoleón no
descansó hasta que el emisario
que traía el correo hubo llegado
sano y salvo, temía que algo le
ocurriera. Es probable que
Napoleón como tantas otras
personas asociara el hecho de la
rotura del cristal con algún mal
presagio.